¿ A qué se dedica el Dr. Georg Schroeder?
El Dr. Georg Schroeder se describe a sí mismo como un jubilado a tiempo parcial. Fue Presidente de BYK-Gardner desde 1985 hasta que en verano del 2014 fue substituido por el Sr. Frank Wagner.
Una vez que alcanzó la edad de jubilación, se celebró una gran fiesta de despedida en las montañas de Baviera (foto).
Dejar de trabajar completamente, no estaba en los planes del doctor en física; “después de una larga, interesante y exitosa vida profesional, yo no me veía capaz de estar simplemente sentado en el sofá viendo la televisión. Sería como parar de golpe después de correr una maratón”.
Jubilado a tiempo parcial, el Dr. Schroeder, dos semanas al mes es un jubilado en la zona norte de Baviera y las otras dos semanas, es Presidente y activo socio de la empresa ADI Instrumentos de Barcelona, una de las cinco divisiones de la compañía española Grupo ADI.
ADI Instrumentos representa equipos de medición y ensayo de las empresas: BYK-Gardner, Q-Lab y VMA Getzman, tanto en España como en Portugal. “Siempre me han gustado todos los trabajos que he tenido. Me apasionó la idea y disfruté construyendo algo nuevo” comenta el Dr. Schroeder.
Georg Schroeder tiene su segundo domicilio cerca de la playa en Barcelona y está más asentado ahora que en los años anteriores a su jubilación.
Durante su vida profesional, solía viajar alrededor de 120 días al año, principalmente un USA, Asia y América Latina. De todos los países que ha visitado, América Latina es su favorita: “en los años 70, esta región era muy excitante de visitar, ya que un viaje de negocios podía suponer entre 4 y 6 semanas de duración y era muy difícil contactar con tu país de origen. Existía la posibilidad que una cita de negocios previamente acordada, se cancelara en el último momento ofreciendo la oportunidad de poder visitar y conocer bien el país y su gente”. Georg Schroeder también hizo muchos contactos en China y tuvo la oportunidad de conocer el país bastante bien.
Su compromiso en Barcelona será para más o menos 3 años. “Esto ya está bien” piensa Georg Schroeder a sus 67 años pero sintiéndose como si tuviera 55, “uno tiene que hacerse concesiones”. Por una lado a su mujer, a quien no ha dedicado todo el tiempo que le hubiera gustado debido a tantos viajes que ha tenido que realizar y por otro lado por el bien de su salud.Georg Schroeder se siente en forma gracias la práctica de deportes como el ciclismo o la natación y además le gusta mucho caminar y explorar ciudades extranjeras a pie.